

Espiritualadad
En Horizonte Azul vemos al ser humano como un ser autónomo, profundo y complejo que conociendo sus limitaciones dependencias e implicaciones socio ambientales, se desarrolla solidariamente sintiéndose participe de su entorno, de la sociedad que surge y con la que convive. Teniendo en mente ese ser humano ideal, la Comunidad Terapéutica Horizonte Azul impulsa un desarrollo equilibrado e integral trabajando en cada área (Cuerpo, Mente y Espíritu) alimentando este último a través de grupos Psico- Espirituales donde el individuo desarrolla su conciencia espiritual y hace de esta una herramienta capaz de producir un crecimiento sostenible y por lo tanto desarrollar una disciplina espiritual.
El proyecto terapéutico educativo de Horizonte Azul cree en el ser más profundo de toda persona humana. También en la persona dependiente a la sustancia psicoactiva, cree en él como persona humana, con sus recursos, posibilidades y al mismo tiempo sus dificultades y problemas; en este caso “un problema más”, la dependencia a la droga. “Vemos al ser que está detrás de la droga” y que por ser un ser humano posee en sí mismo la posibilidad de cambiar su estilo de vida y de abrirse a nuevas posibilidades: La persona tiene posibilidades inéditas que crean sorpresa... Creemos en la capacidad de recuperación existente en el adicto.